RESILIENCIA DEL RECIEN NACIDO UN NUEVO CONCEPTO PARA LA SALUD DE LAS TERNERAS

Por: Dra. Melissa Alpízar B- Médica Veterinaria en salud de hato – Costa Rica/ diciembre 2020. Contacto: [email protected] / tel.: 84097253

El calostro es la clave de la supervivencia de nuestro reemplazo, el manejo que se dé a las terneras desde su primer día de vida, será proporcional a la calidad y cantidad de la leche futura. Es importante no descuidar los conceptos básicos; “Porque lo que no se mide, no se mejora”.

El principio del encalostrado parece una labor sencilla, sin embargo, la práctica demuestra que no todos los calostros son de la misma calidad y que no siempre se maneja de manera correcta esta acción en las lecherías.

Las tasas actuales de mortalidad de las granjas lecheras son del 5 al 10%, y en cuestión de morbilidad, la diarrea puede llegar a tasas del 40 %, lo cual se refleja en grandes pérdidas económicas en las explotaciones lecheras. Las enfermedades pueden tener un gran impacto en el futuro de la ternera, según la presente investigación, se demuestra que las terneras que sufren al menos un episodio de diarrea, necesitarán más tiempo para lograr su primer servicio, y en última instancia, producirán menos leche en sus primeras lactancias, así lo menciona (Hulbert y Moisá, 2016).

 

¿Qué es la resiliencia?

“En general, la resiliencia se refiere a la capacidad de tener

 un buen resultado, a pesar de las graves

 amenazas para la adaptación o desarrollo”

(Dakos et al., 2014)

 

Para terneras la resiliencia es la capacidad que poseen para adaptarse a un cambio en el medio ambiente, incluyendo los cambios de temperatura, nutrición, agrupación y exposición a enfermedades infecciosas, entre otras cosas. Esta resiliencia de la ternera comienza con el manejo correcto en el periodo de la vaca seca, ya que las hormonas secretadas en un estado de estrés durante la gestación, afectan directamente la función placentaria. Las catecolaminas pueden inducir hipoxia y acidosis debido, a los cambios en los vasos sanguíneos.

Cuatro conceptos que ayudan a aumentar la resiliencia en la cría recién nacida.

  1. Epigenética

La epigenética implica cambios que pueden afectar patrones de herencia, ya que se modifica la forma en que los genes se expresan. Las terneras que han tenido algún proceso de diarrea antes de los 90 días de edad, producen una media de 344 litros de leche menos en su primera lactancia en comparación con las que nunca tuvieron diarrea.

Los efectos positivos de la epigenética en las primeras 8 semanas de vida de una ternera lechera son:

  • Mejor desarrollo de las glándulas mamarias e hígado.
  • Mayor producción de leche.
  • Fertilidad: mayores ganancias de peso durante el pre-destete.
  1. Socialización

La implementación de medidas de bioseguridad es esencial para la disminución de fómites que ingresan a la ternerera y son los responsables de futuras enfermedades infecciosas. Con el uso del pediluvio en las instalaciones de las terneras, con esto tenemos a mano una excelente estrategia para evitar la diseminación de microorganismos patógenos. Recordemos que son animales recién nacidos, los cuales adquieren la inmunidad mediante las inmunoglobulinas provenientes del calostro, y entre más expuestas estén las terneras a situaciones estresantes y agentes causantes de enfermedades, mayor es el riesgo de la morbilidad o la mortalidad, provocando grandes pérdidas económicas que pudieron evitarse, trabajando en la prevención.

III. Bienestar

 "Cinco libertades" que apoyan a los animales en su bienestar

 

1.Principios de bienestar animal ➡ Criterios de bienestar.

2.Correcta alimentación ➡ Ausencia de hambre y sed.

3.calidad en alojamiento ➡ Confort térmico, capacidad de descanso,

y facilidad de movimiento.

4.Buena salud ➡ Ausencia de dolor, lesiones y enfermedades.

5.Comportamiento apropiado ➡ Libertad para expresarse normal, buenas relaciones humano-animal, y ausencia de miedo y angustia.

Los criterios indispensables respecto a la crianza de terneras que son proporcionales a la epigenética:

  • Alimentación

En muy pocas fincas se comprende bien la importancia del calostro, sin embargo, siempre existe un espacio para la mejora y para la aplicación de nuevos conceptos.Durante las primeras 6 horas de vida, los terneros deben ser alimentados con un mínimo de 4 litros de calostro de alta calidad (> 50g IgG / Litro), ya que la absorción de inmunoglobulinas disminuye después de este tiempo. Los primeros litros deben administrarse inmediatamente después del nacimiento, o antes de las 6 horas de vida.

En muchas granjas, la alimentación de los terneros antes del destete se basa en una cantidad definida (en promedio 4 litros por ternero, por día), sin embargo, es de suma importancia el pesaje de las terneras al nacimiento para considerar las necesidades reales, ya que deben recibir alrededor del 10% de su peso corporal en leche o sustituto lácteo cada día.

En el 2016, realice un estudio en distintas fincas lecheras de la zona de Vara Blanca de Heredia y de Poas de Alajuela valorando la transferencia de inmunidad pasiva en las terneras recién nacidas, mediante análisis sanguíneos y refractometría. Entre los destinitos resultados, se determinó que existe diferencia significativa en la forma de alimentación de las terneras al momento del nacimiento. Se evidencio que las terneras que consumen el calostro directamente de la madre, ingieren menor cantidad de inmunoglobulinas, que las terneras que consumen el calostro mediante chupón; y esto se debe a que muchas veces por la conformidad anatómica de la ubre se dificulta el proceso de amamantamiento (mayor desarrollo de glándula mamaria- ubre colgante- deformidad de pezones etc.) consumen menor cantidad de calostro.

Ya que no existe una relación positiva en el traspaso de inmunidad pasiva estimulada por el amamantamiento, lo más recomendado es retirar al recién nacido y alimentarlo con el chupón, de esta manera nos aseguramos la cantidad de calostro que ofrecemos y que este sea en el tiempo indicado. Por otra parte, evitamos que el recién nacido se alimente de pezones que en muchas ocasiones se encuentran sucios.

Debemos tener muy presente que las terneras son el futuro reemplazo de la explotación lechera, por lo tanto, deben consumir la leche de la mejor calidad. Un estudio reciente demuestra que, los terneros tienen 5.9 veces mayor masa mamaria parenquimatosa y más células del tejido mamario, cuando se alimentan con un sustituto de leche de alta calidad en las primeras 8 semanas de vida, en comparación con los terneros alimentados con leche entera o leche de descarte.

  • Vivienda de calidad

 Las instalaciones de las terneras deben de estar protegidas de corrientes de aire y este aire debe de fluir. Las dimensiones de las instalaciones les debe permitir acostarse, estirar las extremidades y levantarse sin ninguna dificultad.

La ventilación también es importante, el amoníaco en el medio ambiente puede ser peligroso, ya que los niveles superiores a 25 ppm, pueden tener un efecto perjudicial sobre el tracto respiratorio, aumentando el riesgo de enfermedad respiratoria. La Investigación sugiere que los altos niveles de amoníaco durante los primeros meses de vida, pueden tener un impacto negativo en la edad del primer parto.

  • Buena salud

Desinfectar el ombligo de un ternero recién nacido, es una de las primeras prácticas que puede ayudar a evitar futuras infecciones. Lo ideal es cortar el ombligo colocando 3 dedos en la base del mismo y el restante es lo que se elimina, y en cuanto la aplicación del yodo al 7%, se prefiere aplicar para desinfectar el ombligo durante 3 días

.

  • Comportamiento apropiado

Un factor clave en el bienestar que influye en el comportamiento apropiado es la relación entre los terneros y los humanos que los cuidan. La relación humano-animal se puede definir como el grado de parentesco o distancia entre un animal y un humano. También se ha demostrado que un manejo inadecuado crea tanto estrés como miedo. Esto puede volverse crónico cuando los animales están continuamente en presencia de humanos que no los manejan bien y una consecuencia de este alto nivel de estrés, es la baja productividad y predisposición a la enfermedad.

 

  1. Bioseguridad

A continuación abordaremos las medidas de bioseguridad relacionadas con la higiene, la limpieza y desinfección, así como el control de plagas y roedores. Estos juegan un papel vital en la salud de los terneros.

  • Higiene

Un área de parto limpia es de vital importancia, ya que el primer contacto que el ternero tiene con el medio ambiente. Como su inmunidad aún está en desarrollo, un ambiente contaminado es un desafío para las terneras (esto también es importante para las vacas, para prevenir mastitis y otras enfermedades infecciosas.).La ubre debe estar limpia antes de recolectar el calostro y los recipientes de calostro deben lavarse a fondo con agua y jabón, y desinfectarse.

Los corrales o cunas, deben de limpiarse y desinfectarse todos los días y cada vez que se trasladen o se cambien animales de posición, o ingresen nuevos a la finca. Los biberones de leche y los baldes de agua y comida también deben lavarse cada vez que se alimenta a los animales y como ya se mencionó, el agua debe ser limpia y de buena calidad.

  • Control de plagas

Las moscas son portadoras de enfermedades infecciosas, especialmente las relacionadas con la diarrea, estas se reproducen en el material orgánico, especialmente en las heces.

Se recomienda tratar con insecticidas o con trampas, ya que los roedores también  crean muchos problemas en las granjas, incluyendo la transmisión de Salmonella, criptosporidiosis, leptospirosis y otras enfermedades virales.

 

Resumen y conclusiones

Tener protocolos específicos es una buena forma de manténgase en el camino correcto.

La resiliencia se fortalece mediante:

  • Epigenética: asegúrese de que sus terneras comiencen bien con la ingestión de calostro y con la adición de alimento líquido y solido de alta calidad durante la primeras semanas de vida. Hacerlo activa genes de manera positiva, resultando en aumentos en la producción a largo plazo.
  • Socialización: La vivienda en pareja o en grupos homogéneos es mejor para las terneras pre-destetadas, tanto para su desarrollo social como para aumento de peso y desarrollo del rumen.
  • Bienestar: Adoptar un enfoque de bienestar tendrá un impacto directo de manera positiva en la salud y el sistema inmunológico de terneros.
  • Bioseguridad: la bioseguridad tiene un impacto directo y positivo en los terneros y su resiliencia. Siguiendo los protocolos se minimiza el riesgo de enfermedad.

 

Referencias.

*Universidad Autónoma de Barcelona, 08193 Bellaterra (Barcelona), España* Articulo Bayer.

 

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